Hace ya 6 años que conocí a una nueva amiga. Al principio de conocernos me gustaba, me caía bien. Parecía que estábamos conectadas, que ella siempre sabía lo que necesitaba y lo que deseaba.
Entendía que no estuviera a gusto con mi cuerpo, que a veces me apetecía comer una tableta de chocolate porque me sentía deprimida, y también sabía que después, me sentiría muy culpable y querría solucionarlo; así que me sugería formas para dejar de sentirme mal y aliviar mi culpa, como vomitar, tomar laxantes o hacer ejercicio.
Siempre me decía que no pasaba nada, que en realidad lo controlaba y que era la mejor manera. Cuando estaba harta de hacer dietas y no conseguir resultados, ella venía con cosas ricas y me decía: “Hazlo, luego no cenas y ya está” “Come esto, que no pasa nada”. Aunque después se contradecía un poco, y me miraba con cara de desaprobación… Yo me sentía mal y ella me sugería que vomitase o que hiciera ejercicio durante horas para dejar de sentirme tan mal.
Aunque al principio éramos inseparables, ahora me agobia un poco. Ya no me siento comprendida por ella, sólo controlada. Me acompaña a las tiendas para recordarme que ese pantalón me hace un culo enorme, viene conmigo y mis amigas a tomar algo y sólo me repite que deje de ponerme como una foca, aparece cuando me miro al espejo y me señala todos mis defectos…
Ni siquiera ahora me consuela. Cada vez que me doy un atracón, viene para criticarme e insultarme; incluso después de vomitar ya no me siento mejor… Ella me acusa de no saber controlarme, de ser débil, de recurrir siempre a lo mismo… Es como si ya no nos entendiéramos.
Desde hace meses no consigo que se calle. Opina de todo, me critica en todo y nunca tiene un gesto de consuelo o compasión. Nunca pensé que diría esto, pero QUIERO QUE SE VAYA. Quiero que deje de hablarme, me gustaría poder ir de compras sin sentirme gorda cada vez que me pruebo algo, deseo poder hablar con chicos sin que ella me esté diciendo que no van a fijarse en mí… ¡¡¡QUIERO QUE PARE!!!
Quiero que se calle, pero no sé cómo hacerlo. He acabado dominada por ella, y no hago nada sin preocuparme de lo que pensará ella o de cómo me hará sentir. Sé que será difícil, pero quiero recuperar las riendas de mi vida, y volver a sentir afecto por mí.
Ah, por cierto, a lo mejor la conocéis de verla por ahí… No es mala chica, y al principio es maja, pero creo que ella tampoco se acepta mucho a sí misma… mi amiga se llama BULIMIA.
En ocasiones, los problemas de alimentación nos sobrepasan y dominan nuestra vida; si te has sentido identificada con este testimonio y quieres solucionar lo que te pasa, no dudes en pedir ayuda. Lo que ahora parece inabarcable, con ayuda puedes superarlo.